Os traigo una receta que despertará todos vuestros sentidos, las alcachofas con almejas. ¿A qué no os las queréis perder?
Limpiamos las alcachofas retirando las hojas exteriores hasta llegar a la zona más tierna del corazón. Les cortamos la punta más seca y limpiamos los troncos. A medida que vamos limpiando las alcachofas las partimos por la mitad y las dejamos en un bol con agua y abundante zumo de limón. Así conseguiremos que se oxiden menos.
Pon abundante agua con una pizca de sal en una cazuela. Añade medio limón y su zumo. Escurre las alcachofas e incorpóralas a la cazuela. Cocínalas durante 13-15’. Escurre y reserva las alcachofas. Cuela el caldo y resérvalo también.
Primero hay que quitar la arena a las almejas. Para ello, ponerlas en remojo en agua fría con sal un par de horas antes de preparar la receta.
En una sartén, calienta 4 cucharadas de aceite de oliva. Añade el perejil, la cayena y los ajos. Cuando estos comiencen a dorarse, añade la harina y la cocinamos un poco, con medio minuto es suficiente. La harina nos ayudará a ligar y espesar la salsa.
Después añadimos el vino blanco, damos unas vueltas y dejamos que evaporeel alcohol durante un minuto aproximadamente. Echa el agua y el caldo de cocer las alcachofas.
Saca las almejas del agua, con cuidado de no coger la arena que habrán soltado.Incorpora las almejas y las alcachofas a la sartén. Dales unas vueltas, pon la tapa y cocina a fuego fuerte hasta que se abran las almejas, unos 3’ aproximadamente.
Probamos el punto de sal, si es necesario añadimos más, aunque normalmente no hace falta porque las almejas sueltan agua salada.Sirve las alcachofas con almejas bien calientes y decora con perejil picado.
*Se podrían utilizar alcachofas de bote pero el resultado no será el mismo.